Entrenamiento de Akira

Misame ingresa a una de las habitaciones junto con el joven Akira.
Al ingresar, se puede observar un enorme salon, decorado con diversas
estatuas de dioses griegos y una gran alfombra de color rojo y negro.
Misame camina hasta el centro e invita al joven a acercarce.

- Bien, Akira... Estas preparado?

Agrega al final esperando una respuesta.

-Claro que sí. Dice entusiasmado golpeando uno de sus puños contra la palma de su otra mano. Luego se acerca lentamente a él, a la vez que observaba con detenimiento cada una de aquellas estatuas, reconociendo sólo algunas.

-Muy bien Misame-sama, sólo digame qué hacer. Comenta con intriga, era la primera vez que entrenaba con alguien en mucho tiempo, y se sentía extraño de alguna manera, pero iba a dar lo mejor de sí para poder volverse más fuerte.

- Bien... Para empezar, comenzaremos aumentando un poco tu resistencia y reflejos.

Misame retira de su mochila un par de extrañas pesas para las piernas, las cuales tenian 5 orificios cada una y se las entrega al joven para que se las coloque.

- Colocate estas pesas en las piernas. Como veras éstas tienen 5 pequeños orificios cada una, y en ellas yo utilizare una tecnica para aumentar el peso.

Misame extiende su mano y demuestra al joven una extraña esfera de luz.

- Esto será un simple juego. Cada vez que la esfera de luz impacte en una de los orificios, aumentaran en 5kg tus pesas. Tu objetivo es evitar estas esferas, de esta manera aumentaran tus reflejos, y si mis esferas impactan en tus piernas aumentaran el peso, y deberas correr con esta condicion, y aumentaras algo de resistencia y velocidad. Si 10 esferas impactan en tus piernas, es decir 5 en cada pierna, el juego se termina.

El joven se coloca en una extraña posicion, esperando que el joven reaccione.

- Cuando quieras puedes comenzar a correr!

Termina por decir algo entusiasmado.

-Bien, empecemos entonces. Dijo luego de que terminó de colocarse las pesas

Entonces comenzó a correr entusiasmado. Era consciente de que su velocidad no era muy buena, por lo que decidió valerse principalmente de sus reflejos, los cuales tampoco eran la gran cosa pero almenos servirían para compensar en parte su falta de velocidad.

(Definitivamente tengo que evitar que 10 de esas esferas me den... o almenos tendré que arreglarmelas para soportar el tiempo suficiente para mejorar mi resistencia y velocidad.) Pensó a la vez que cambiaba de dirección repentinamente, espectante a cualquier movimiento de Misame.

- Bien entonces... Comencemos!

Misame sujeta fuertemente la esfera de luz y la lanza a las piernas de Akira, mientras comentaba en su lanzamiento

- Cada vez que evadas mis esferas, las pesas especiales realizaran una especie de masaje en los musculos de tus piernas y aumentara tanto tu resistencia como la fuerza de tus piernas. Pero luego se veran limitados si el peso aumenta...

La esfera comienza a acercarse a una de las piernas de Akira.

La velocidad de la esfera tomó por sorpresa a Akira, quién tras un improvisado movimiento apenas fue capaz de esquivarla.

(Parece que no me será fácil... bueno, tendré que arreglarmelas.) Pensó confiando en sigo mismo, ahora que conocía la velocidad a la que se movian las esferas se sentía un poco más seguro, pero de todas maneras sabía a ciencia cierta que Misame no iba a dejarle las cosas tan fáciles.

Entonces sintió aquello que le había descrito hace unos segundos, una sensación confortable de masaje en sus piernas.

El joven dios se desliza tranquilamente hacia un lateral, creando una nueva esfera en sus manos, lanzandola a una velocidad no muy alta hacia las piernas del joven.
En cada movimiento que realizaba, Misame embozaba una sonrisa ya que al parecer disfrutaba aquel entrenamiento.

Esta vez Akira se encontraba alerta, y logró esquivar la esfera saltado corta pero precisamente hacia un costado, para luego enfocar nuevamente su vista en Misame, a la vez que continuaba corriendo a su alrededor.
El jóven empezaba a sentirse apenas cansado, y como era consciente de que el entrenamiento no había hecho más que comenzar intentó regular de mejor manera su ritmo respiratorio.

-Vamos Misame-sama, pongame las cosas un poco más difíciles. Dijo sonriendo, a sabiendas que quizá más tarde se arrepentiría de sus propias palabras.

- Si asi lo quieres...

Agregó en un tono animado, para luego deslizarse hacia al lateral opuesto donde se movió antes y crear 2 esferas de luz. Misame lanza la primer esfera, y aun moviendose lanza la segunda. Las esferas se hacercan al joven por lugares diferentes.

Dos esferas se encontraban de camino hacia Akira, el cuál, y con un buen esfuerzo, intentó evitar ambas, pero solo fué capaz de esquivar la primera, mientras que la segunda daba con la pesa que se encontraba en su pie derecho.

Entonces pudo notar con total claridad cómo su pierna derecha le pesaba más que la izquierda, con la incomodidad que aquello conllevaba, aunque aún podía moverse sin mayores difícultades.

Akira le dirigió una sonrisa de satisfacción a Misame, por primera vez sentía que se encontraba ante un verdadero maestro que le ayudaría a mejorar considerablemente su estado físico.

-Bueno, ya estoy listo para la próxima ronda. Dijo mientras sacudía levemente su pie derecho en el aire, experimentando y tratando de familiarizarse con su nuevo peso.

Misame no había dejado terminar de hablar a Akira, y con un rapido movimiento se encontraba detras de éste con una nueva esfera en su brazo izquierdo.
Con gran velocidad el joven dios golpea la pierna izquierda del chico, acumulando 5kg mas y nivelando sus piernas. Misame realiza un salto hacia atras y observa al chico

- Perdon por aquel rapido movimiento, pero si no nivelamos tus piernas podrias desgarrar tus musculos en cualquier momento...

Misame demuestra una gran sonrisa, sabiendo que se había excedido con su movimiento. El dios celestial extiende su brazo derecho y crea una nueva esfera de luz.

El muchacho quedó sorprendido, Misame había desaparecido prácticamente de su vista en un segundo, ubicandose detrás suyo y nivelando el peso de sus piernas.

-No tienes por que pedir perdón, más bien yo tengo que agradecerte... hubiera sido vergonzoso que me desgarrara corriendo. Dijo mientras se ponía de pie, para luego alejarse unos metros antes de que Misame le arrojara aquella esfera de luz.

Una vez la esfera se acercó a sus pies Akira se paró de repente y cambió la dirección, esquivandola sin mayores difícultades ahora que había logrado evitar unas cuantas, aunque el nuevo peso en sus piernas se notaba.

Misame levanta ambos brazos apuntando hacia el cielo, y comienza a lanzar esferas de luz como si nada. Las esferas salian una tras otra de sus palmas, aproximadamente una esfera cada 3 segundos. Cada vez que una de ellas aparecía en la escena se dirigía velozmente hacia las piernas de Akira a una velocidad no muy rapida.

- Supongo que ya te abras dado cuenta, Akira... -Agrega el joven mientras continuaba lanzando su ataque- Por mas que tengas 5kg en cada pierna aun puedes moverte como antes, y esto es gracias a las pesas que te otorge con anterioridad. Mientras mas saltos realices, mas trabajarán tus musculos. Tus reflejos, tu resistencia, tu fuerza en las piernas, todo aumenta en cada segundo. Y cuando tus pesas alcancen el maximo de kg y te las quites, notaras el gran incremento de velocidad...

Misame continua lanzando su ataque lentamente para que el joven sea capaz de esquivarlo. Sin embargo, el ataque no se detenía en ningun momento.

Lo que había dicho Misame era cierto, el peso de 5kg que llevaba en cada una de las piernas ya no le incomodaba para nada, por lo que pudo esquivar fácilmente las primeras esferas.

Una tras otra Akira perdía la noción del tiempo mientras intentaba esquivar los continuos ataques de Misame, cambiando de dirección, saltando, cualquier movimiento que le permitiera evadir aquellas esferas le venía bien. Pero inevitablemente luego de tantos ataques poco a poco algunas fueron dandole en las pesas, provocando que los músculos de el muchacho se adapten al peso en pocos minutos, logrando así una mejor resistencia.

Luego de tantas esferas esquivadas Akira comenzó a familiarizarse con sus improvisadas técnicas de esquiva, logrando movimientos más precisos y mejorando también sus reflejos.

Pero después de un tiempo que pareció interminable el jóven se percató de que ya tenía 4 esferas en cada pesa, y que por lo tanto sólo era cuestión de que una más le de en cada pierna para que todo hubiese terminado, razón por la que se esforzó al máximo en esos últimos minutos.

Entonces empezó a sentir el cansancio invadiendolo lentamente, casi como un veneno que se extendía por todos los músculos de su cuerpo.

Misame simplemente sonreia en cada ataque, ya que al parecer aquel joven era realmente bueno. Su emocion por la enseñanza frente a aquel chico incrementaba en cada momento que el joven evadia sus ataques, pero solo era cuestion de tiempo para que todo terminara.
El dios celestial comprende que el joven ya encontraba cansado, y que si continuaba esforzandose los musculos del chico terminarian por colisionar.
Con un rapido movimiento, Misame lleva los brazos hacia atras creando 2 nuevas esferas en sus manos, una en cada mano.
Al extender sus brazos hacia adelante las esferas salen disparadas a gran velocidad, impactando en los orificios correspondientes y logrando que el joven cayera al suelo por la gran cantidad de peso. Misame se acerca lentamente al chico, observandolo desde arriba

- Simplemente excelente, Akira. Pero el juego termino... Puedes quitarte las pesas si asi lo deseas, y aunque no lo creas podras alcanzar una velocidad similar a la mia gracias a ellas.

Akira permaneció recostado sobre el suelo mientras escuchaba las palabras de Misame, aquél entrenamiento había concluído.

Entonces lentamente se quitó las pesas luego de sentarse en el suelo, sintiendo instantaneamente el cambio. Entusiasmado se incorporó, y con sus últimas fuerzas corrió unos cuantos metros saltando de vez en cuando, el cambio era increíble, y aunque le doliera todo el cuerpo aquella sensación de ligereza los embriagaba completamente.

-Muchisimas gracias Misame-sama. Dijo volviendo a donde se encontraba antes. -Ahora ya puedo moverme con mucha mayor libertad que antes, y todo se lo debo a usted.

- Por nada, solo cumplo con mis obligaciones... -Agregó en un tono de broma- Supongo que es todo lo que podemos hacer por hoy. Te sugiero que descances un poco, y mas adelante te daras cuenta de los reflejos que has obtenido el dia de hoy.

El joven dios comienza a rodearse de un ligero torbellino

- Es todo por hoy... En otro momento que tengas un mejor estado te enseñaré tecnicas de cuerpo a cuerpo. Te sugiero nuevamente que descances, y que luego realices 3 misiones en el BlackList y vuelvas para poder entrenarte... Es todo, asi que mucha suerte ^^

Termina por decir para luego desaparecer del lugar, ya que se trataba de un clon.

Akira vió como el clon desaparecía sin dejar rastro.

-Hasta luego Misame-sama. Dijo saludando con la mano a donde se encontraba antiguamente el clon.

Entonces, y con una sonrisa de satisfacción en el rostro, regresó camino a su habitación, deseoso de descansar luego de tanto esfuerzo.

El clon de Misame se adentra en el lugar esperando la entrada de Akira

Akira llega donde había entranado por primera vez, lleno de entusiasmo y energía para aprovechar al máximo este nuevo entrenamiento.

-Bueno, qué tendré que hacer esta vez Misame?. Le preguntó curioso, a la vez que sus ojos volvían a recorrer aquella sala, recordandole la primera vez que había estado en ella.

retira tranquilamente de su mochila una simple pluma de color blanca.

- Observa... Esta es una pluma especial que reacciona con la manipulacion de la persona. Esta pluma cambia de color acorde al tipo que sea tu manipulación...

Al instante la pluma se vuelve de color Verde, ya que el elemento natural de Misame es el viento.

- Lo ves?

Agrega el joven. Luego la pluma se vuelve al color original y se la entrega a Akira.

- Intentalo... y averiguaremos cual es tu manipulacion...

[Rol Off] Los colores que puedes elegir:
Rojo - Fuego
Azul - Agua
Marron - Tierra
Verde - Viento
[Rol On]

Akira toma la pluma con intriga, y tras dejarla sobre la palma de su mano esta se vuelve color marrón.

-Que elemento es el que manipulo Misame?. Le preguntó aunque ya creía saber la respuesta.

- Tu manipulacion natural es la tierra, Akira...

Termina de decir retirando la pluma de la palma del joven y guardandola cuidadosamente en la mochila. Acto seguido continua hablando

- Entonces nos concentraremos en descubrir tu aura de tierra. Lo primero que debes hacer es emanar aura.

Antes de terminar su frase el contorno del cuerpo de Misame se vuelve celeste.

- Para hacerlo, simplemente cierra los ojos y busca dentro de tu interior, sentiras algo que desea emerger desde tu alma, algo completamente diferente.

Akira cerró los ojos y se concentró en sí mismo, en un principio no pudo sentir absolutamente nada, pero a medida que transcurrían los segundos comenzó a notar que había algo que le provocaba una sensación extraña, que le recorrió todos los rincónes de su cuerpo hasta llegar a su pecho, casi como exigiendole salir.

Entonces, tras unos segundos el contorno del cuerpo de Akira también se vuelve celeste, aunque en una tonalidad más débil que el de Misame.

-Bueno, supongo que será cuestión de práctica. Dijo positivamente, esperando más instrucciónes.

- No te preocupes por eso. El aura responde a base de las emociones, eso quiere decir que mientras mas felicidad sientas, mas celeste se notará. Sin embargo, el aura cambiará a un color rojo a causa de la furia, la cual no es recomendable a causa de su inestabilidad.
Pero en fin, ahora debes de imaginar tu elemento. Solamente al realizar esta accion el aura cambiará drasticamente si piensas en una roca, por ejemplo.

El aura de Misame comienza a cambiar lentamente a un color verde e inestable, moviendose hacia diversos lados mientras se escucha un ligero sonido de viento.

- Si en mi caso yo imagino el viento, ésto es lo que sucede. Ahora intentalo, Akira.