Salon Princial.

Sin lugar a dudas- le repondió CHupy clavando la mirada en su cabeza

Una sombra se coloca velozmente detras del joven, golpeandolo fuertemente en la cabeza

No grites en mis aposentos, idiota... Que es lo que quieres?

Temujin al no ver nadie dentro del castillo, avanza hasta llegar el salón principal.
-Draka debe ser, o bastante desconfiado o demasiado orgulloso, para mantenerse solitario en este enorme castillo, sin guardias o heraldos- pensó para si mismo Temujin.
Al adentrarse dentro del salón principal, Temujin se topa una silueta, que cree, se trata Draka.
-He venido de los lejanos aposentos del Dios Misame para aprender de Venerable Draka, ya que las doctrinas de su rival han resultado retorcidos engaños a mis oídos, propias de un alma sin voluntad y decisión. A cambio de aprender, entrego la fuerzas de mis manos y la determinación de mi voluntad para servir a, quien desee, se convierta en mi nuevo maestro- pronuncia Temujin de voz firme, clara y decida, aunque demostrando un fuerte respeto y manteniendo una distancia y con un gesto que desprenden sumisión y respeto.

-Muchas gracias, Maestro- Temujin se inclina para hacer una reverencia en agradecimiento.
-Disculpe, pero no soy un guerrero: como dije anteriormente, mi nombre es Temujin Borjigin, hijo de Yesugei Baghatur, difunto Kan del extinto clan Qabul, él cual logró consumar su venganza contra Jamuka, señor de los Keraitas. Buscando un nuevo destino, me hice aprendiz del Señor Misame, pero estos ojos- detiene su discurso brevemente para levanta su rostro y clavar una penetrante mirada en Draka, para luego volver a recobrar su postura sumisa - estos mismos ojos han capaces de ver a través sus enseñanzas, y este corazón las ha encontrado deficientes; sus tareas son absurdas, fatigosas y sin objetivos, destinadas al fracaso.
Ahora que ya no le soy un desconocido y me ha aceptado como su discípulo, solo me queda decir que he venido a mi Señor, quien considero encarnación y legítimo heredéro de la obra de Uzume, siguiendo el deseo convertirme en uno de sus guerreros bajo su consejo y estoy dispuesto a comenzar desde este mismo momento.- Temujin pronunció esto guardando su posición inclina y expectante a lo que Draka fuera a pronunciar.

-No considero la gratitud y el respeto una debilidad, Maestro- Temujin se pone de pie y observa gallardamente a su maestro Draka.