[Misión] Desierto de Escorpion (Completa)

Hacia un esplendido día, mucho sol y pocas nubes de esos días que te gustaria estar en una playa, pero este no es el caso.

Tsk... maldito calor, ya podria refrescar un poco.
Pero bueno centrandonos estoy en una misión.

El joven demonio camino unos cuantos kilometros por el desierto.

Tsk.. que lata ya no pienso caminar más con este calor y esta pierna, lo unico que conseguire es cansarme antes de tiempo.
Todo lo que se veia era arena y mas arena por todos lados, ni una sola sombra por el momento donde descanzar, asi que el chico se sento en esa arena caliente e hizo una pequeña duna para decostarce.

Tsk... vamos ven... eso era lo que esperaba.
Ahora con esta arma la batalla sera interesante.

El chico se levanto apollandose en "YAMATO" dios dos paso y mira a aquel insecto con una mira fria y algo aterradora.
Apunto con su arma al escorpion y activando el mecanismo una de las puntas salio con una cadena, el chico comenzó a giralda como si una cuerda fuera, levantando polvo y con este ocultando la punta del arama.

Al poco rato de este acto la cadena golpeo un costado del escorpion.
Te dolio bicho

El chico al instante dejo de levantar arena sotuvo la parte de la cadena con la mano izquierda mientras que con la derecha mantenia el mango firme.
El pie bueno lo tenia apollado en el suelo mientras el otro lo subia y lo bajaba de forma amenazadora.

De repente un aguijon salio de la nada, un escorpio lo estaba atacando por la espalda mientras los demas observaban.

El chico salto, como si ya ubiera visto el ataque venir.
Sin vasilar un segundo le lanzó un ataque, errollando su cadena en su aguijon, pasando alrededor del cuello del bicho descomunal.

Vamos caballito- dijo en tono burlon mientras montaba al escorpion.
Acto seguido comenzó a enrrolar su cadena la cual apretaba más y mas al bicho cortandole la cabeza y el aguijon. Pero antes de eso se bajo del animal para no sufrir algun tipo de rose con el aguijon.

Vamos... a quien le toca...? Lanzó ese discurso amenazador poniendose en guardia.